Sevilla está pasando por incertidumbre en torno a dos figuras importantes para su cambio de temporada: Quique Sánchez Flores y Sergio Ramos.
Según Marca, mientras Sánchez Flores está en conversaciones con el equipo, Ramos sigue considerando sus opciones.
Sin embargo, a pesar de la intención de Sevilla de prorrogar su contrato, tal vez por dos años, cualquier aumento salarial sería mínimo. Ramos está considerando propuestas extranjeras, posponiendo su decisión hasta el final de la temporada, de manera similar a la de Quique.
La planificación de Sevilla para la próxima temporada se llevará a cabo lentamente, limitada por restricciones financieras.
Víctor Orta se enfrenta a la tarea de reducir los gastos en diferentes posiciones, especialmente en la defensa central, donde Sevilla cuenta con seis defensores, incluyendo al prestatario Gattoni.
Por lo tanto, la decisión de Ramos tiene un gran peso, lo que podría afectar las intenciones del club de despedir a Tanguy Nianzou y Marcão.
Víctor Orta debe interpretar cuidadosamente este escenario, con la posibilidad de mantener un defensor en caso de que Ramos abandone, con Loïc Badé y Kike Salas liderando la defensa, respaldados por Nemanja Gudelj. Es necesario realizar cambios mientras Sevilla busca optimizar su plantilla y aliviar las dificultades financieras.
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